Tenemos un nuevo gobierno que ha generado expectativas en una buena parte de la población. En las primeras semanas de su actuación encontramos fortalezas y debilidades; acciones que generan esperanzas y otras que generan dudas sobre si, en determinados ámbitos o sectores de los poderes del Estado, tendremos más de lo mismo, o se generarán cambios significativos, que diferencien al actual gobierno de los pasados gobiernos del PLD, o incluso del gobierno del PRD de los años 2000-2004.

El discurso de toma de posesión del presidente L. Abinader estuvo cargado de esperanzas y promesas de cambio. Comenzó su discurso solicitando un recuerdo solidario por las y los enfermos del Covid y luego reconoció el trabajo y la dedicación del personal médico y sanitario. Además, hizo referencia a la memoria histórica del Grito de Capotillo donde se inició el proceso de la llamada Restauración (1863-1865) o guerra emancipadora del poder colonial español.

Señaló L. Abinader: “No voy a engañar a nadie con palabras dulces, promesas huecas ni horizontes falsos porque, ni la altísima magistratura que hoy asumo ni la decencia me permitirían semejante irresponsabilidad (…) Aun así, en este día solemne, ofrezco trabajo y diálogo ilimitado para, entre todos, salir adelante más fuertes, más unidos y cargados de esperanza”. Y habló de políticas y acciones a impulsar en temas relacionados con la salud en tiempos de pandemia global, la economía, las relaciones exteriores, la educación, la institucionalidad, la seguridad social, y la transparencia y la lucha contra la corrupción, tema que enfatizó de una manera significativa.

Muy significativo fue, también, el discurso del presidente del Senado, Eduardo Estrella, quien comenzó citando al líder principal de la Restauración, G. Luperón al decir: “El que ama a la patria no puede comprometerla, no puede venderla ni traicionarla, sino servirla y defenderla”. Y reafirmó su compromiso con el cumplimiento de las funciones legislativas: “Desde el Congreso Nacional asumimos, el compromiso como poder del Estado de trabajar sin descanso para garantizar que cada ciudadana o ciudadano se sienta debidamente representado, para como legisladores fiscalizar la debida ejecución del presupuesto nacional y velar por el uso transparente de los recursos del Estado”.

Algunas designaciones de funcionarios han contado con el apoyo masivo de la población, como las de Carlos Pimentel como director de compra y contrataciones, Miguel Ceara Hatton, como ministro de Economía, Planificación y desarrollo, y, sobre todo, la designación de Miriam Germán Brito como procuradora general de la República, y de Yeni Berenice Reynoso, como procuradora adjunta; lo cual fue interpretado por la población como una oportunidad para comenzar a hacer justicia contra quienes en las últimas décadas se han enriquecido con la apropiación ilegal de los bienes públicos.

Por otro lado, hay que destacar la presencia de algunos jóvenes significativos en el congreso nacional, como Faride Raful en el senado y José Horacio Rodríguez en la cámara de diputados, entre otros; que pueden ser unas voces diferentes que representen realmente a la población que los eligió. Además, la presencia de Manuel Jiménez, en la sindicatura de Santo Domingo Este y Carolina Mejía en el Distrito Nacional, entre otros y otras.

Algunos hechos ocurridos recientemente han llamado a la atención sobre el real compromiso con la institucionalidad, del PRM, tal como prometió L. Abinader en su discurso. Entre éstos podemos señalar:

1.- La designación como funcionarios públicos de legisladores y legisladoras que ya habían sido elegidos y elegidas para representar a su gente y de momento los han puesto en otras funciones.

2.- Cambio en la cámara de diputados de un artículo de ley para permitir que Wellington Arnaud pudiera ser director ejecutivo del INAPA, sin ser ingeniero.

3.- Las declaraciones de algunos líderes y lideresas del PRM, como la gobernadora de La Vega, señalando que les toca la exclusividad de los puestos públicos, porque ahora son ellos y ellas quienes están en el poder.

4.- El desconocimiento de la ordenanza 24-2017que pautó la designación como directores y directoras regionales de educación a personas que fueron a un concurso de oposición y que según, dicha ordenanza, fueron elegidos y elegidas hasta el 2022, con evaluación de desempeño después del primer año, y del tercer año.

La educadora y líder sindical M. T. Cabrera, refiriéndose al hecho de sustituir a las y los directores regionales que fueron designados por concurso, señaló: “Esa resolución contradice los compromisos firmados en el Pacto Educativo 2014-2030, y dijo que le parece “muy grave” que el máximo organismo de Educación haya adoptado una resolución contraria a la Ley General de Educación 66/97 y a los consensos alcanzados para ir superando los obstáculos que frenan el avance de la educación dominicana”.

En definitiva, podemos decir, que el gobierno del “cambio”, comienza con luces y sombras. Por lo que toca a la sociedad crítica, a las y los periodistas comprometidos con la institucionalidad y las leyes, a las y los educadores críticos, a los líderes y lideresas de las organizaciones sociales y comunitarias, estar vigilantes, para exigir y defender el compromiso con la institucionalidad democrática, el respeto a los pactos sociales, la real lucha contra la corrupción y la impunidad; acciones y actitudes concretas que abonan la búsqueda del bienestar colectivo. Pues, como dijo J. Bosch: “A la Patria no se le usa; se le sirve”.