La ciencia económica nos dicta un paradigma insoslayable: La maximización de los recursos en tiempos de escasez.

Es precisamente aquí, como dicen, donde se le tuerce a la puerca el rabo.

Estamos acostumbrados a ubicar y explotar  recursos (renovables o no) y convertirlos en bienes y servicios. Sin embargo, cuando la oferta de estos recursos empieza a declinar, entonces es que iniciamos procesos y algoritmos para maximizar su uso, a través de las tecnologías y estrategias de marketing.

Todo lo anterior se desarrolla dentro de un modelo financiero estructurado por las lonjas de valores y el dinero.

La humanidad, casi desde sus orígenes, ha encontrado inusitadas abundancias en las fuentes de estos recursos, llegando inclusive a dilapidarlos. Esto así, debido a un afán egoísta de poseer para demostrar poder y vanaglorias.

Muchas guerras fratricidas y holocáusticas se han llevado a cabo por la posesión de estos recursos en aras de obtener ventajas geopolíticas y el dominio absoluto de las rutas comerciales y marítimas, tal y como lo fueron la de La Seda y el Opio.

Con el aumento exponencial de las tasas de natalidad y la disminución de las de mortalidad, se ha creado una masa poblacional que esta sobrepasando los límites de la prudencia en el uso de los recursos económicos y financieros.

Cada día más, se evidencia un incremento en la extracción, proceso, financiación y colocación de estos recursos a nivel mundial, aún con el avance de las tecnologías aplicables a estas etapas.

Desde el Foro de Davos hasta la cátedra tercermundista, el tema de la depredación, de origen o disponibilidad de estos recursos, es asignatura obligada; la humanidad esta cobrando conciencia que la dilapidación de estos recursos plantea la necesidad de adoptar un esquema de Economía Circular.

Ellen Patricia McArthur, promotora de este régimen económico, en el año 2010, preside la Fundación con su mismo nombre y, de manera contundente plantea lo siguiente:

¨ El presente modelo económico de extraer, producir, desperdiciar" está llegando ya al límite de su capacidad física. La economía circular es una alternativa atractiva que busca redefinir qué es el crecimiento, con énfasis en los beneficios para toda la sociedad¨.

¨Esto implica disociar la actividad económica del consumo de recursos finitos y eliminar los residuos del sistema desde el diseño; respaldada por una transición a fuentes renovables de energía. El modelo circular crea capital económico, natural y social y se basa en tres principios: eliminar residuos y contaminación desde el diseño, mantener productos y materiales en uso, regenerar sistemas naturales¨.

La analítica y dinámica de inferencia de este modelo se basa en una estrategia que tiene por finalidad y objetivo reducir la introducción de materiales vírgenes (no reciclados) así como también los grandes volúmenes de desechos industriales, en la sociedad, a través del cierre de los ciclos procesales o flujos económicos que los producen.

Para entender lo anterior, estoy en la obligación de presentarle varios esquemas para que el tema sea digerible.

1-El ciclo de vida ¨normal¨ de un producto tiene estas etapas: extracción, fabricación, transporte, mercadeo, uso y el fin de su vida útil.

2-La economía lineal, que es el esquema actual que rige las cadenas de producción y manejo de desechos, tiene estas etapas: materias primas, producción, comercialización, consumo, trituración y vertederos.

3-En la economía circular, este esquema es el siguiente: materias primas, producción, comercialización, consumo, trituración, reciclaje/conversión, materias primas secundarias inertes/residuos no peligrosos y los vertederos.

Como podemos apreciar, los desechos industrializados se reciclan en materiales inertes, no contaminantes, para su deposición final.

Muchos países ya han iniciado este esquema de economía circular. Japón y Alemania lo han adoptado a través de la gestión de los residuos mediante la aplicación sistémica de las ¨3R¨-Reducir, Reciclar, Reutilizar-.

El tema central de este esquema es que el actual flujo de la economía lineal, que incide en la dinámica de explotación y uso de los  recursos TIENE que ser transformado en un flujo de economía circular.

Es bueno señalar que la Republica Popular China ha adoptado recientemente este esquema dentro de un plan quinquenal de desarrollo de su economía. La transformación reduciría los índices de contaminación y mejoraría grandemente la conservación de sus recursos naturales.