SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Rosa Hernández, madre de Rosaura (Esperancita) Almonte, la adolescente embarazada que falleció en el 2012 porque se le negó un aborto para proceder con el tratamiento que requería para la leucemia, emitió una carta abierta al presidente de la República Luis Abinader y la primera dama Raquel Arbaje en la que les pregunta qué harían si una de sus hijas tuviera que enfrentarse a una de las causales.

“Ustedes son padres de tres hijas que son su adoración. Los entiendo y acompaño en su sentimiento pues Rosaura era para mí todo esto y mucho más. Por esto, me permito preguntarle de madre a madre, de madre a padre, ¿qué harían si, Dios no lo quiera, alguna de ellas tuviera que enfrentarse al dilema de su vida: acceder a un aborto o morir o ir a la cárcel?”, preguntó al pedir disculpas por tomarlas a ellas de ejemplo.

Aseguró conocer que la pareja presidencial no permitiría que ninguna de sus hijas sufra y que harían todo lo que esté a su alcance para salvarlas, como encontrar a un médico que le preste el servicio, llevarla a otro país o alguna otra medida que consideren adecuada.

La madre de Esperancita dijo que escribía esta carta en memoria de su propia hija y de muchas otras niñas y mujeres como Lizdalfi o Carmen, que han sido víctimas de la “absurda prohibición total del aborto que impide se proteja su vida y salud ante embarazos complicados”.

En la misiva, recordó al presidente que en su toma de posesión dijo que las mujeres le importan y que en diciembre se pronunció a favor de las tres causales porque son un asunto de salud, por lo que “es hora que esas palabras se conviertan en acciones concretas para cuidar la vida, la salud y la dignidad de todas las dominicanas sin distinciones”.

Le recordó a la primera dama que como abanderada de la niñez y la adolescencia, es necesario aprobar las excepciones al aborto “para proteger a las niñas violadas para que puedan continuar con sus sueños de vida y no deben criar a los hijos de su violador”, como es el caso de una niña de 13 años, embarazada por su propio papá.

Finalmente, solicitó una cita formal con la pareja presidencial para contarles en personas quien fue Esperancita y el sufrimiento y el dolor que inspira su lucha.

Esta misiva pública fue difundida en el contexto del debate del Código Penal en la Cámara de Diputados, donde uno de los temas es la despenalización o no del aborto en tres causales.